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domingo, 28 de junio de 2020

STEFAN ZWEIG

Stefan Zweig

Stefan Zweig

Ana Alejandre

Stefan ZweiG (Viena,1881-Petrópolis, Brasil, 1942) escritor austríaco. Hijo de una acaudalada familia judía, aunque no practicante de dicha religión, Su padre, Moritz Zweig, fue un rico fabricante textil, y su madre, Ida Brettauer Zweig, hija de una acomodada familia de banqueros italianos.

Estudió en la Universidad de Viena, en la que consiguió el título de doctor en Filosofía. También realizó estudios sobre Historia de la Literatura, conocimientos que le permitieron relacionarse con la vanguardia cultural vienesa de la época. Y fue en ese período, hacia 1901, cuando publicó sus primeros poemas, una colección titulada Silberne Saiten (Cuerdas de plata), que estaba influenciada por en Hugo von Hofmannsthal y Rainer Maria Rilke, aunque había traducido anteriormente a Charles Badelaire y a Emile Verhaeren.

También publicó varios artículos en el periódico más importante de Viena, el Neue Freie Presse, cuyo editor era Theodore Herzl, personaje principal del Movimiento Nacional Judío. Por esta colaboración, con la que demostraba su talento literario, pudo librarse de trabajar en la empresa familiar.

Por la buena situación económica de su familia, Zweig se pudo permitir aquello que más le gustaba después de la literatura como era viajar. Viajó frecuentemente entre Viena, Berlín, París y Bruselas, En estos viajes conoció y trató a poetas, escritores y artistas como Auguste Rodin, Rainer María Rilke, Romain Rolland, W.B. Yeats, Pirandello y otros muchos, y comenzó a escribir novelas cortas y obras teatrales que obtuvieron una buena acogida por el público,

Desde el inicio de la Primera Guerra Mundial, Stefan Zweig se declaró partidario del pacifismo y cultivó una gran amistad con Romain Rolland. Finalizada la contienda, se instaló en Salzburgo (1918) y, ciudad en la contrajo matrimonio en 1920 con Friderike Maria Burger von Winternitz, una admiradora de su obra que había conocido ocho años antes. Dicho matrimonio terminó cuando su esposa le sorprendió con su joven secretaria, Lotte, en un hotel de la Costa Azul. Unos meses antes, el escritor había tomado la decisión de abandonar su mansión de Salzburgo por miedo a la aviación nazi, que arrojaba panfletos sobre la ciudad. Zweig hizo donación de algunos de sus libros a la Biblioteca Nacional Austriaca y abandonó Austria para dirigirse a Londres con su segunda mujer, en 1934. Ya entonces tenía problemas para publicar en Alemania, aunque pudo escribir el libreto para “Die schweigsame Frau” (La mujer silenciosa), ópera de Richard Strauss por imposición de su compositor, que fue estrenada en Dresde y a cuyo estreno rehusó acudir Hitler, aunque estaba anunciada su presencia. La obra, después de tres representaciones, fue prohibida.

Como intelectual comprometido, Zweig se opuso vehementemente contra leas doctrinas nacionalistas y el espíritu revanchista de la época. Esa cuestión le inspiró escribió una larga serie de novelas y dramas, en lo que fue el período más productivo de su vida, la la década de 1930 a 1940.Anteriormente, había publicado el relato histórico “Momentos estelares de la humanidad” (1927), que es una una de sus obras que cosechó mayor éxito.

Entre su obra literaria se encuentran también historias noveladas (“Erasmo de Rotterdam” (1934); “María Estuardo” (1935); “Américo Vespuccio”, (1942), así como una serie de ensayos de temas literarios e históricos que son sus obras más más conocidas por el público. Entre ellas se pueden citar los títulos de “Verlaine” (1905), “Verhaeren” (1910), “RomainRolland” (1920),”Tres maestros (Balzac, Dickens, Dostoievski) “(1920), “La lucha contra el demonio” (1925) y “La curación por el espíritu” (1931).

En cuanto a la novela, siguió cultivando preferentemente ese género literario, creando un estilo literario muy personal que ofrecía un especial estudio psicológico de los personajes, unido a una excelente técnica narrativa.

En 1934 publicó su triple biografía Mental Healers, a la vez un ensayo sobre los orígenes de la ciencia cristiana (religión espiritualista fundada por Mary Baker Eddy) y el psicoanálisis.

En estos años es “Jeremías”, obra teatral antibélica, que publicó mientras estaba en el Ejército del Imperio Astrohúngaro, publicado mientras duró su exilio en Suiza, inspirada en la I Guerra Mundial que fue estrenada en Nueva York en 1939.

El suidiio de Stphan Zweig

Todo suicidio es un enigma, incluso para los seres más cercanos al suicida .El detonante final puede ser muy distinto a los que lo que suponen los demás, En el caso del autor austríaco, parece ser que fue debido a un proceso de desarraigo que terminó minando la voluntad de vivir del escritor. El sentimiento de desarraigo comenzó en 1934, cuando marchó de Austrias rumbo a Londrés, Bath y Nueva York, en una búsqueda constante de un retiro espiritual que nunca encontró. El profesor George Prochnik cuenta esos últimos días en el libro 'The Impossible Exile' (Other, 2014), que revela muchos datos sobre las amargas vivencias del matrimonio Zweig.

Zweig y su esposa se mudaron a una casa a las afueras de Bath, (ciudad en el condado ceremonial de Somerset, en el sudoeste de Inglaterra)., aunque afirmaba sentirse más aislado que en ningún otro lugar del mundo, según le dijo a un amigo en 1939. Se inquietaba porque los nazis pudieran llegar hasta el Reino Unido, Aunque la invasión nazi nunca se produjo, los aviones de la Luftwaffe destruyeron Bath en abril de 1942, aunque el matrimonio Zweig ya se había instalado en Nueva York.

Zweig no encontraba la paz en ningún sitio. Se sentía desilusionado por el recuerdo de la Europa que ya no existía y que él añoraba e incapaz de aceptar el fracaso de su sueño europeísta, sintiéndose expulsado de su país y de la ciudad en la que se había criado y también humillado al ver que el nazismo se había apropiado del idioma alemán.

El escritor echaba de menos los cafés europeos y frecuentaba a menudo la biblioteca de la Quinta Avenida de la ciudad neoyorkina. Se sentía mal porque oros otros refugiados centroeuropeos, le llamaban constantemente para pedirle dinero. Entre ellos se encontraba su amigo Klauss Mann que definió a Zweig cuando lo encontró en Nueva York, como "un sonámbulo que escucha su nombre". El escritor le dijo "No somos sino fantasmas o recuerdos", y le confesó que no sabía si merecía la pena seguir viviendo como una sombra en Nueva York.

Había días en los que se definía con sarcasmo como "ex escritor y experto en visados" y, otros, padecía lo que sus amigos llamaban el síndrome de la mujer de Lot: una angustia que lo paralizaba al contemplar la destrucción del continente europeo al que dedicó su obra y en cuya unión nunca dejó de creer.

Ni Zweig ni Lotte se encontraban a gusto y enseguida empezaron a buscar un refugio fuera de Manhattan. Entre varias opcionesdecidieronal final, instalarse en el suburbio de Ossining, por su cercanía con la ciudad a la podían llegar en apenas una hora y le ofrecía tranquilidad necesaria para escribir. Era el mejor reflejo del mundo de ayer al que tanto añoraba el escritor.

El escritor y su esposa pensaron en la posibilidad de marcharse a Cuba pero, al final decidieron instalarse en Brasil y mar4charon para ese país en 1941. Era la segunda vez que Zweig visitaba dicho país, pues había estado anteriormente en 1936. Se instaló el matrimonio en Petrópolis, ciudad en la que construyó su palacio de verano Pedro II y donde se instalaron cientos de alemanes por su clima fresco y su cercanía a la gran ciudad.

Publicó a su llegada su obra “Brasil, país de futuro” de la que vendió miles de ejemplares, aunque le valieron muchas críticas por parte de la izquierda brasileña, por sus muchos tópicos y su defensa implícita de la dictadura de Vargas.

Trabó amistad en Petrópolis con un médico alemán, varios intelectuales franceses y la poetisa chilena Gabriela Mistral

Zweig siguió releyendo clásicos como Tolstoi o Goethe y filósofos como Montaigne, pero también realizaba salidas lúdicas y bajó con su esposa al carnaval de Río siete días antes de morir. Su ánimo decayó cuando leyó, al día siguiente de asistir al carnaval, las noticias sobre los avances nazis en Asia y Oriente Próximo. "Europa se ha suicidado", repetía una y otra vez lleno de pesar y desaliento., según manifestaron los amigos que se reunían con él en un café de Río de Janeiro.

Al volver a Petrópolis, Zweig donó sus libros a la biblioteca y envió sus manuscritos a varios a archivos fuera de Brasil. Su inseparable 'fox terrier' se lo regaló a su casera, en una enigmática carta que era el preludio de su decisión de quitarse la vida. Quemó después los papeles que aún tenía en una hoguera en el jardín e invitó a cenar el sábado 21 de febrero a su amigo Ernst Feder que escribió en su diario que Zweig y su esposa habían sido muy amables y que padecían últimamente de insomnio.

Dos días después, un criado encontró los cadáveres del matrimonio tendidos sobre su cama. Sobre la mesilla había unas monedas, una caja de cerillas y dos vasos vacíos. Dejó una carta de despedida.“Saludo a todos mis amigos. Ojalá puedan ver el amanecer después de esta larga noche. Yo, demasiado impaciente, me voy antes de aquí”.

Después de su muerte y, a pesar de ser un escritor muy reconocido en la década de 1930 a 1940,especialmente, ha caído en el olvido.